El consultorio médico de La Robla, en León, cuenta con 1.000 m2 útiles desarrollados íntegramente en planta baja y organizados en torno a un patio. Su planta cuadrada se organiza con un área funcional diferenciada en cada uno de sus cuatro lados (administración al este, consultas ordinarias al sur, urgencias al oeste y almacenes al norte). En el centro, el patio ajardinado constituye el corazón del proyecto, aportando luz, ventilación y vistas, y conectando con las salas de espera como un espacio más de estancia y descanso al aire libre.
Este proyecto, firmado por el estudio Quirós Presa, priorizó la utilización de materiales naturales y de proximidad, reduciendo en lo posible la huella de carbono del edificio.
Destaca su fachada, compuesta de gaviones rellenos con los cascotes de hormigón procedentes de la demolición de la chimenea de la antigua central térmica de La Robla. Un material reciclado, de proximidad (km0), que además de aportar una gran inercia térmica cumple un objetivo estético y emocional: alberga la historia reciente del paisaje de La Robla y de su transición energética en una fachada totalmente única y anclada al territorio.
El consultorio busca ser un referente de la eficiencia energética: diseñado con criterios pasivos y bioclimáticos, prescinde completamente del uso de combustibles fósiles y cubre gran parte de la energía necesaria con producción propia mediante la instalación fotovoltaica situada en la cubierta.
Inaugurado en 2023 con un coste final de 1.000€/m2, se ha convertido en el segundo edificio sanitario de España en conseguir el prestigioso sello de eficiencia energética Passivhaus.