Reconocido diseñador y arquitecto internacional, Ignacio García de Vinuesa ha enfrentado la crisis económica mundial asumiendo nuevos retos profesionales. Hoy trabaja en proyectos en Brasil, Miami, Colombia y España. Su última apuesta: indagar en el proceloso mundo de la subvención.
Al diseñador Ignacio García de Vinuesa la crisis económica mundial le ha llevado a enfrentrar nuevos retos profesionales, tanto en España como fuera de nuestras fronteras. Para mantener el negocio interior, así como la caída del sector de la construcción y del interiorismo, Vinuesa decidió ayudar a sus clientes a financiar parte de sus proyectos. ¿Cómo? Consiguiendo subvenciones. Para ello, se puso a estudiar y analizar ese complejo y engorroso mundo hasta operar eficazmente en él. Fuera de España conquistó nuevos mercados, entre los que se encuentran Colombia, Miami o Brasil. Ambos retos le han aportado beneficios. 
Los diseñadores de moda decoran hoteles, los interioristas crean colecciones de muebles, los arquitectos diseñan coches o joyas… ¿Es el poder de la marca lo que permite saltarse todas las barreras a la hora de diseñar?
Este fenómeno es un producto del consumismo. Hay muchos diseñadores españoles que se han puesto a hacer interiorismo; buen gusto puede tener todo el mundo, pero también se tienen que tener conocimientos técnicos. Algunos se meten y venden sus trabajos a precios desorbitados que no se corresponden con la realidad. La marca manda.
Hay muchos clientes que acuden a nuestro estudio buscando sólo la firma, saben lo que quieren, pero creen que la firma les va a aportar el éxito.
Sin embargo, esto no es cierto. En nuestros proyectos nos gusta involucrarnos no sólo desde un punto de vista estético, sino también aportando ideas en cuanto a la viabilidad y gestión del negocio. Nos acabamos convirtiendo en una consultoría. Queremos que los negocios que diseñamos sean un éxito en todos los sentidos. Si el negocio fracasa, aunque sea muy bonito, para nosotros también es un fracaso.
La experiencia le ha llevado a…
Llevamos más de 15 años trabajando en el sector hotelero, hemos diseñado más de 150 restaurantes y muchos hoteles; al final aprendes, por muy tonto que uno sea. Yo soy arquitecto, diseñador y también empresario, tengo dos restaurantes y puedo aportar al cliente experiencia en todas estas facetas.
