Para la creación de este proyecto, junto a Jaione estaba Ana Iraizoz, arquitecta de AIA reformas. Como resultado, un laborioso diseño de segregación de espacios para aprovechar al máximo el espacio disponible, trabajando sobre como proyectar la luz natural, hacia los espacios interiores, de esa forma se dio prioridad a los puestos de trabajo o despachos para disponer de toda la luz natural, con unos cristales fijos en paralelo llegar hasta la sala más interior.
Una reforma integral donde se cambió suelo, ventanas, techos, iluminación, se reformaron los aseos y se realizó un laborioso trabajo de carpintería a medida.
El hilo conductor de este proyecto ha sido el nogal como material protagonista y las curvas, tanto en parámetros verticales como en el propio mobiliario realizado a medida. Desde la entrada accedemos a la recepción y nos envuelve un ambiente cálido, relajante, con luz de ambiente en la zona de espera, únicamente vestida con tres bancos blancos y formas redondeadas, destaca como protagonista del espacio la lámpara del mostrador, una maya metálica en dorado en forma tubular y el propio mostrador realizado a medida en madera de nogal, y relieve en líneas verticales, con sus formas curva que invitan a entrar al resto de los espacios. Un ventanal fijo con cristal rayado y enmarcado en nogal, deja entrar la luz a este espacio. Al otro lado un primer espacio destinado a sala de reuniones para ocho personas.
Para conectar los espacios ubicamos en el centro del local, el distribuidor todo revestido en paneles de nogal, incluyendo las puertas para que el conjunto sea único y envolvente, destacando los huecos de luz enfatizados con la iluminación artificial. Destacando los apliques dorados de la pared.
Los despachos se conectan con cristales como separadores, estos enmarcados con gruesos perfiles de nogal que le dan belleza y los resaltan, utilizando esta técnica en todos los elementos del conjunto. El mobiliario también en nogal y estructura negras, como algunos de los elementos en pequeñas dosis, manillas y focos empotrados, es de líneas sencillas que coordina muy bien con el conjunto.
El aseo se revistió con un material porcelánico pétreo muy cálido en tono y de gran formato, un lavabo sobre encimera blanco de líneas sencillas y una encimera en nogal con el detalle de la lámpara colgante junto a un espejo vertical. El toque de color lo dan unas láminas en cada uno de los espacios de líneas abstractas .
