El impacto creciente del cambio climático motiva a la industria de la arquitectura a alinearse con el desarrollo de proyectos más orientados hacia la sostenibilidad. Un ejemplo destacado de esta tendencia es la firma de arquitectos WallMakers, que ha tomado la iniciativa al emplear 1.425 neumáticos desechados recubiertos de arena del desierto para construir u pabellón en la Trienal de Arquitectura de Sharjah.
De acuerdo con el post del medio Designboom, este diseño es una respuesta a los problemas globales de residuos y un recordatorio sobre las tendencias actuales de la arquitectura moderna.
Construyendo sostenibilidad en ambientes áridos
El pabellón denominado “3-Minute Corridor”, se suma al tema central de la trienal: «La belleza de la impermanencia”: una arquitectura de adaptabilidad».
La estructura ilustra la escala de residuos generados por el hombre, con aproximadamente 684.931 neumáticos desechados cada día a nivel mundial, la cantidad que se desecha en solo tres minutos de caminata por un pasillo. Entre otros materiales, utilizaron arena del desierto y yeso de barro para trasmitir durabilidad y confiabilidad a la estructura.
El pabellón de WallMakers no se limita a ser una exhibición visual, sino que también demuestra la durabilidad y confiabilidad de la reutilización de materiales. Entre otros aspectos destacables de esta estructura se incluyen:
- La creatividad detrás de los materiales: la fusión de estos materiales resulta en una forma modificada de mampostería que no solo simboliza el compromiso de reutilizar recursos desechados, sino que también garantiza un interior con aislamiento térmico gracias al yeso. Este aislamiento proporciona un espacio más fresco en el árido entorno del desierto, marcando un hito importante en la construcción sostenible en ambientes desafiantes.
- Innovación local: el diseño del pabellón muestra el potencial de construir edificios sostenibles en regiones áridas utilizando materiales disponibles localmente. Esta elección no solo reduce la huella ambiental al minimizar el transporte de materiales, sino que también elimina la necesidad de sistemas de enfriamiento activos, reduciendo el consumo de energía y promoviendo la autosuficiencia en la regulación de la temperatura.
La arquitectura del pabellón 3-Minute Corridor, ejemplifica cómo la creatividad y la sostenibilidad pueden converger para abordar problemas globales de residuos y promover una visión fresca y adaptable de la arquitectura en un mundo en constante cambio.
Este logro no solo es un tributo a la innovación en la construcción, sino también un recordatorio de que la belleza puede encontrarse en la reutilización y la adaptabilidad en lugar de la permanencia estática. El pabellón no solo es una obra arquitectónica, sino un llamado a repensar la forma en que construimos y habitamos nuestro entorno.
