En el corazón de Larrabetzu, un pequeño municipio aledaño a la vibrante Bilbao, el renombrado restaurante Azurmendi ha desvelado su más reciente renovación: un espacio de apenas 47 metros cuadrados donde la sustentabilidad, la creatividad y la tradición se entretejen para dar vida a un jardín verdaderamente impactante.
El diseño de su original jardín, realizado por el estudio Villalón Studio, refleja un compromiso palpable con el medio ambiente que resuena con la filosofía del fundador de Azurmendi, el chef Eneko Atxa, conocido por su cocina innovadora y respetuosa con la naturaleza.
«Entender desde el inicio la metodología de trabajo de Eneko y valorar el respeto a la naturaleza y a las personas con las que trabaja fue fundamental para crear este lugar emocional donde disfrutar pausadamente de una cocina excepcional», destacan desde illalón Studio.
Un jardín que seduce el paladar y la conciencia
El nuevo diseño de Azurmendi reinterpreta los elementos fundamentales que permiten a las flores —y a la vida— florecer: tierra, minerales, agua, aire y luz. Cada componente del restaurante ha sido pensado cuidadosamente para crear un «jardín» donde los comensales puedan disfrutar de los sabores de la cocina de Eneko en un ambiente que celebra la belleza y la fragilidad de nuestro ecosistema.
La madera de castaño, cosechada directamente del entorno local, emerge como el material estrella, infundiendo al espacio un aire orgánico y acogedor. Sin embargo, las verdaderas protagonistas son las flores, creaciones de Villalón Studio en colaboración con Azurmendi, que adornan el lugar incorporando un mensaje profundo sobre la sostenibilidad y la innovación.
La flor Azurmendi simboliza la esencia del proyecto. Diseñada con productos biodegradables y residuos de la cocina del restaurante, la flor representa el ciclo continuo de la vida, donde nada se desperdicia y todo se transforma. Los maestros ebanistas de Ziriak dieron forma a la madera con sus habilidades artesanales, mientras que Sanjo Inox, con su trabajo en cerrajería, contribuyó a perfilar los detalles más finos.
