José Luis Ábalos ha tomado posesión como ministro de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, la renombrada cartera de Fomento que asume tras ocho meses en funciones. En la presentación del nuevo Ministerio, Ábalos ha señalado “el combate a la pobreza, la desigualdad y la exclusión, la modernización de la economía, la lucha contra el cambio climático y la inestabilidad política” como prioridades del nuevo Gobierno.
“Los desafíos ambientales y del cambio climático que ya nos afectan a todos nosotros requieren una reorientación en el Ministerio”, explicaba en relación al renombramiento de la cartera. “El transporte y la edificación son responsables del 36% de las emisiones de gases de efectos invernadero en España y tenemos que reducirlos en aproximadamente un tercio en 2030 y eliminarlos en 2050. Acertar en esas políticas es vital, tenemos que hacer transición ecológica justa y rápida”.
Asimismo, el ministro ha subrayado el desafío que supone la transformación digital para el sector del transporte, inmerso en una “revolución tecnológica” y con fenómenos como el vehículo autónomo, los vehículos compartidos, las plataformas digitales de movilidad o la electrificación del automóvil.
Como explicaba Ábalos, el renombrado Ministerio de Transporte, Movildiad y Agenda Urbana pretende ampliar su imagen de la de una cartera meramente constructora: “A este Ministerio se le asocia, tradicionalmente, como un Ministerio constructor de infraestructuras, más que como un proveedor de políticas públicas para el día a día de los ciudadanos –continuaba Ábalos–. Este enfoque pudo tener sentido hace un siglo o hace unas décadas. Pero hoy no captura bien nuestra misión”.
Sin embargo, el ministro ha asegurado en su discurso que esta labor constructora no pasará a un segundo plano, aún con corredores por completar que requieren grandes volúmenes de inversión. “Pero esta acción inversora deberá responder eficazmente a los desafíos de la movilidad y la vivienda de España en el actual contexto social y económico”, puntualizaba Ábalos. “Eso ahora implica priorizar las Cercanías, la intermodalidad y la innovación tecnológica, entre otras cosas. Inversión, sí, toda la que sea posible, pero inversión eficaz”.
