Son muchas las ocasiones en las que nos encontramos jardines desvencijados, con los pavimentos rotos o el césped casi seco. Por eso, es importante destacar cómo llevar a cabo una obra de tal magnitud debido a la cantidad de modificaciones que requiere, sobre todo si es en un espacio amplio y con los problemas habituales de un jardín descuidado desde hace tiempo.
Desde Fernando Pozuelo Landscaping Collection, os presentamos un ejemplo de una obra que realizamos de unos 3.500 metros cuadrados donde se necesitaba una rehabilitación integral del exterior. Así, se actuó en todos los pavimentos exteriores, en estructuras que ornamentan la fachada, arcos, elementos metálicos y toldos. Todo el jardín se diseñó siguiendo un estilo mozárabe, por lo que en él destacan elementos verticales como las almenaras y el empleo del agua a nivel lineal a través de una acequia, recordando el uso que se hace de este recurso en lugares emblemáticos como la Alhambra. Asimismo, el pavimento inicial de rodaduras estaba muy envejecido, por lo que se sustituyó por Aripaq, un material blando de arena compactada que destaca por su resistencia. Por su parte, la piscina fue un elemento clave en el que se intervino, cambiando el color y creando nuevas láminas de agua.
La iluminación adquiere especial relevancia en este proyecto, tanto en las partes acuáticas como las ajardinadas. Además, la luz de las almenaras y las suspendidas de una gran encina consiguen dar un aire romántico que domina todo el espacio. Ese ambiente se refuerza gracias a la vegetación elegida, seleccionada con especies similares a las de las almunias árabes, como naranjos, jazmines, granados, flores anuales y plantas ornamentales que tienen como finalidad hacer del jardín una especie de oasis. En ese sentido, se trató de minimizar el empleo de agua, por lo que se redujo la superficie de césped a la mitad, todo ello sin que este perdiera frescura ni vegetación.
Tras estas modificaciones, conseguimos transformar un espacio que tenía muchos aspectos mejorables, entre ellos, una piscina de un color que no gustaba a su propietario, además de problemas eléctricos y un césped seco. El restyling que se le dio fue total y acabó quedando un jardín maravilloso.