Los parqués metalizados ArtDeco están cubiertos por una fina capa de metal en su superficie. Después el metal se lija y se pule la superficie varias veces para darle ese aspecto brillante que le caracteriza, consiguiendo además conservar el auténtico veteado de la madera noble del roble. La colección conste de cinco acabados: plata, cobre, bronce, gold y bing bing.
No se trata de una pintura, sino de una aplicación de metal puro en frío y en forma líquida mediante un proceso patentado. No es conductor de la electricidad, ni es galvánico. Se puede limpiar fácilmente y es muy resistente.
La superficie está compuesta de metal puro al 97% y presenta todas las características del metal. Los productos habituales de limpieza no afectaran la superficie de metal al menos que estén claramente contraindicados.
En cuanto a la resistencia al tránsito, como cualquier otra clase de suelo el suelo mostrará signos de desgaste si se este es elevado. Los suelos metálicos han sido puestos a prueba y no se apreciaron signos de deterioro importantes, tan sólo unos pequeños rasguños, comunes en las láminas y metales fundidos.
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