fbpx
InicioProtagonistasAlan Hedge: "La funcionalidad y la estética deben estar equilibradas y no...

Alan Hedge: «La funcionalidad y la estética deben estar equilibradas y no son mutuamente excluyentes»

Alan Hedge, Profesor emérito de la Universidad de Cornell, comparte su perspectiva sobre la importancia del diseño centrado en el ser humano para mejorar la salud, el bienestar y la productividad de las personas en los entornos laborales.

El departamento Human Centered Design de la prestigiosa Universidad de Cornell (Ithaca, Nueva York) es un centro de investigación transdisciplinario que busca enriquecer la vida de las personas y sus entornos mediante la integración creativa de conocimientos analógicos y digitales. Su misión es abordar desafíos del mundo real mediante el estudio de diseño, ciencias sociales y ciencias físicas.

En esta entrevista, nos adentramos en el mundo de la ergonomía y el diseño de espacios de trabajo de la mano del Profesor emérito Alan Hedge, miembro del departamento Human Centered Design y gerente de la empresa de consultoría Humanuse. Con una carrera marcada por una profunda investigación en psicología ambiental y su posterior enfoque en la ergonomía, el Profesor Hedge ha dedicado décadas a comprender cómo los entornos construidos pueden afectar la salud, el bienestar y la productividad de las personas.

Desde la integración creativa de conocimientos analógicos y digitales hasta la importancia de personalizar los diseños para adaptarse a las diferentes necesidades individuales, el Profesor Hedge comparte valiosas perspectivas sobre cómo el diseño centrado en el ser humano puede mejorar nuestra vida cotidiana. Descubramos junto a él cómo un enfoque ergonómico puede transformar positivamente nuestros espacios laborales y promover la sostenibilidad humana en un mundo en constante evolución.


— Para quienes aún no estén familiarizados con vuestro trabajo, ¿podría describir brevemente las líneas de investigación y la misión académica del departamento Human Centered Design de la Universidad de Cornell?

El departamento Human Centered Design enriquece a las personas y sus entornos a través de su actividad transdisciplinaria. Mediante la integración de conocimientos analógicos y digitales, herramientas, métodos y procesos creativos de diseño, ciencias sociales y ciencias físicas, abordamos los desafíos del mundo real.

Human Centered Design es un nuevo departamento orientado al Diseño centrado en el ser humano, que se estableció en 2019 por medio de la fusión del departamento de Design and Environmental Analysis con el Fiber Science and Apparel Design. Estos departamentos se establecieron hace más de cuarenta años y yo, desde 1987, ocupé el puesto de Profesor dentro del departamento dedicado al diseño y al análisis ambiental.

— En su posición como Profesor Emérito del departamento Human Centered Design, ¿cómo ha evolucionado su enfoque de investigación y enseñanza? ¿Podría compartir logros o retos significativos a los que se ha enfrentado?

Como profesor del departamento de Design and Environmental Analysis impartí cursos sobre factores humanos y entorno ambiental, diseño ergonómico y métodos de investigación. Ahora, como emérito, no imparto cursos formales, pero doy charlas en forma de podcasts y presentaciones en vídeo.

En el diseño medioambiental se tiende a compartimentar el entorno en campos separados, como el diseño de la iluminación, el diseño acústico, el confort térmico, la ventilación y la calidad del aire, el diseño del mobiliario, etc., pero los seres humanos experimentan todo esto al mismo tiempo en un entorno, así que el reto es cómo enseñar a ser conscientes de la necesidad de integrar estas áreas de estudio separadas para determinar las condiciones medioambientales óptimas para las personas que realizan actividades concretas, porque los requisitos medioambientales cambiarán en función de las actividades que se realicen. Por ejemplo, los requisitos ambientales de un hospital serán diferentes de los de una oficina, una escuela o un hotel, y dentro de una instalación los requisitos ambientales cambiarán según la función, de modo que en una oficina los requisitos son diferentes para un quirófano o una sala de lectura de radiología o un puesto de trabajo de enfermería o una farmacia o una sala de hospitalización para pacientes y, de nuevo, habrá diferencias si estos pacientes son niños o ancianos o tienen enfermedades contagiosas.

aeropuerto
Experiencia de los pasajeros en los vestíbulos de los aeropuertos con cristales de baja emisividad. Imagen de la publicación: A. Hedge et al., «Airport passenger experiences in concourses with either electrochromic or low e glass windows, International Journal of Aviation Management, 2021. 

— Nos gustaría saber más sobre su formación académica. ¿Cómo ha influido esta formación en su enfoque de investigación y docencia?

Tengo una licenciatura y un máster en Zoología, y un máster y un doctorado en Psicología. Mis estudios en Zoología mostraron la importancia de las condiciones ambientales en el comportamiento animal, y mis estudios en Psicología mostraron la importancia de diseñar productos y sistemas de forma que la gente espere poder utilizarlos sin cometer errores ni lesionarse. Mientras hacía mi doctorado tuve el placer de conocer a un arquitecto, Oscar Newman, que escribió un libro sobre el Espacio Defendible, y ese fue el comienzo de mi introducción e interés por la Psicología Ambiental. Después del doctorado, trabajé brevemente en la administración regional y experimenté las diferencias entre las oficinas privadas y las de planta abierta, lo que reforzó mi interés por estudiar cómo afecta el entorno diseñado a la salud, el bienestar y el rendimiento de las personas.

— Volviendo a su recorrido profesional, ¿qué momento señalaría como clave dentro de su amplia carrera en el ámbito de la ergonomía y el diseño de espacios de trabajo?

Cuando me incorporé al mundo académico con un puesto en la Universidad de Aston en Birmingham (Reino Unido), mis intereses se centraron en la psicología ambiental y también llegué a ser presidente de la división de psicología ambiental de la Asociación Internacional de Psicología Aplicada. Sin embargo, empecé a darme cuenta de que, aunque mis estudios de investigación arrojaban resultados interesantes, solía ser difícil trasladarlos a la práctica del diseño. Por ejemplo, mi investigación sobre el diseño de oficinas demostró que las personas que trabajaban en oficinas de planta abierta sufrían más molestias y tenían menos intimidad que las que trabajaban en oficinas privadas, pero ese hallazgo no mostraba cómo cambiar el diseño de las oficinas para resolver el problema, así que empecé a interesarme cada vez más por el diseño ergonómico de los entornos y los productos de esos entornos.

¿Hay algún libro, autor o investigador que ha tenido un impacto significativo en su trabajo?

Muchos libros me han influido: Fundamentals of Skill de Alan Welford, fue importante para la ergonomía; Defensible Space de Oscar Newman, lo fue para la psicología ambiental y, posteriormente, en el campo de los factores humanos y la ergonomía, el trabajo de Hal Hendrick sobre macroergonomía influyó significativamente en mi forma de pensar.

¿Cuáles son los consejos o aprendizajes más valiosos que ha adoptado de sus referentes en su enfoque de la ergonomía y el diseño de espacios de trabajo?

¡Una medida o talla no sirve para todos! Las personas son diferentes, sus necesidades cambian con el tiempo y con las actividades que realizan, así que intentar crear un entorno uniforme para todos no funciona bien. Mis primeras investigaciones mostraron que los hombres y las mujeres respondían de forma diferente al mismo entorno de oficina. En parte esto se debe a las diferencias de vestimenta, en aquella época los hombres llevaban traje y corbata y las mujeres vestido, en parte a las diferencias de talla, por lo que el mismo mobiliario puede sentar mejor a unas personas que a otras, en parte se debe a las diferencias metabólicas, etcétera.

— ¿Cómo puede el diseño arquitectónico de un lugar de trabajo mejorar el bienestar psicológico y social de los trabajadores?

En un nivel básico, los edificios son nuestros refugios climáticamente controlados que nos permiten habitar en una amplia gama de lugares, desde los calurosos desiertos hasta el gélido ártico, desde el nivel del mar hasta las cimas de las montañas, ¡e incluso el espacio! Los edificios también nos protegen de la mala calidad del aire y del ruido. Los edificios son una tercera piel protectora alrededor de nuestro cuerpo (tenemos piel, ropa -segunda piel- y edificios o vehículos -tercera piel). Sin embargo, los entornos construidos deben permitir a las personas controlar sus condiciones para satisfacer sus necesidades, y personalizar y controlar sus entornos. Los edificios y productos elegantes también tienen un efecto emocional positivo en las personas, y respondemos positivamente a su belleza.

home office
Buena distribución de una postación de trabajo en casa. Crédito: Alan Hedge

¿Cómo definiría la correlación entre la ergonomía en el diseño del lugar de trabajo y la productividad de los empleados?

En la práctica actual del diseño se hace hincapié en diseñar productos y lugares que sean sostenibles y tengan un impacto mínimo en el medio ambiente. Sin embargo, estos productos y lugares no siempre son óptimos para las personas. Los diseños ergonómicos mejoran la salud, el bienestar, el rendimiento y la productividad de las personas, y favorecen la sostenibilidad humana.

— En su experiencia de investigación, ¿ha identificado algún factor ergonómico que a menudo sea pasado por alto en los espacios de trabajo modernos?

Muchas organizaciones simplemente quieren comprar diseños de productos únicos para todos sus empleados. Sin embargo, las personas tienen tamaños, formas y capacidades diferentes, por lo que una sola talla nunca se adapta de forma óptima a todas las personas. Por ejemplo, para que una silla sea ergonómica, debe ajustarse desde el percentil 5 de una mujer hasta el percentil 95 de un hombre; sin embargo, este diseño sigue excluyendo al 5% de las mujeres y al 5% de los hombres, y a medida que el diseño se acerca a los extremos también se ajusta menos al cuerpo. Existe el malentendido de que alguien que se encuentra, por ejemplo, en el percentil 95 de altura, también se encuentra en el percentil 95 de otras dimensiones corporales, como la longitud de los brazos o el tamaño de los pies, pero esto no es cierto. Por lo tanto, hay que insistir en que una talla raramente sirve para todos. Además, si no se tiene en cuenta un buen diseño ergonómico, los productos y entornos no sólo resultan incómodos para algunas personas, sino que también pueden ser peligrosos y provocar lesiones y accidentes.

— ¿Cómo equilibraría eficazmente la funcionalidad y la estética en el diseño de un espacio de trabajo ergonómico?

La funcionalidad y la estética deben estar equilibradas y no son mutuamente excluyentes. Sin embargo, aunque algunos aspectos de la funcionalidad puedan interesar a muchas personas, por ejemplo, un escritorio regulable en altura que va desde la altura del codo sentado de una mujer del percentil 5 hasta la altura del codo de pie de un hombre del percentil 95, el diseño estético del producto puede gustar a algunas personas pero no a otras. Si nos fijamos en la variedad de atuendos que lleva la gente, podemos tener la misma talla de zapatos o de ropa, pero estilos muy diferentes y materiales muy distintos, por lo que los factores estéticos son importantes y la gente debe poder elegir para sentirse a gusto con los productos que utiliza.

— ¿Podría compartir algún hallazgo particularmente significativo en cuanto a cómo el diseño del lugar de trabajo afecta la salud de los empleados?

Las lesiones musculoesqueléticas relacionadas con el trabajo ocupan el segundo lugar entre las enfermedades profesionales notificadas en todo el mundo. Estas lesiones se producen debido a aspectos físicos del trabajo, como la fuerza necesaria para realizar el trabajo, la cantidad de repeticiones y la postura que adopta la persona cuando realiza la tarea, y a aspectos psicológicos que pueden provocar estrés laboral, como la falta de control, un ritmo de trabajo demasiado rápido, conflictos con compañeros y jefes, etc. En los últimos más de 30 años he realizado muchos estudios que demuestran que se pueden reducir significativamente estas lesiones utilizando productos ergonómicos adecuados y creando puestos y lugares de trabajo con un diseño ergonómico apropiado, y al mismo tiempo también se mejora la satisfacción y la productividad de las personas.

ergonomia
Estudios ergonómicos para los trabajadores. Imagen de la publicación: A. Hedge et al., «Effects of active sitting chairs on short duration computer task performance […]», 2017.

— Sobre su publicación «Effects of a dynamic foot movement device on cognitive performance in short-duration computer-based tasks» (2018), ¿podría explicar cómo un dispositivo de movimiento dinámico para los pies puede impactar el rendimiento cognitivo?

Un factor que afecta al rendimiento cognitivo es el flujo sanguíneo al cerebro. El flujo sanguíneo al cerebro mejora significativamente al aumentar los movimientos corporales. La contracción de los músculos ayuda a impulsar la sangre, además del efecto del corazón. Esta es la razón por la que caminar mejora significativamente la función cognitiva. Por lo tanto, el uso de un reposapiés dinámico requiere el movimiento de los músculos principales de las piernas, que son los músculos más grandes del cuerpo, y esto ayuda a suministrar más sangre al cerebro de la que se suministra si alguien está sentado en una postura estática.

¿Existen ciertos principios de diseño que considera universales para crear un ambiente de trabajo que promueva la salud y el bienestar?

Para la supervivencia humana, la condición medioambiental más importante es la calidad del aire. Sin oxígeno, nos asfixiamos rápidamente. Los edificios pueden protegernos de la mala calidad del aire exterior, pero con demasiada frecuencia el diseño de la ventilación de los edificios no crea un aire interior limpio óptimo que también esté libre de patógenos aerotransportados como bacterias o virus como el COVID-19. Así pues, un aire sano es el primer requisito para un entorno saludable. A continuación, también son importantes otras condiciones ambientales como la temperatura, la acústica y la iluminación. Una vez que se dispone de condiciones ambientales saludables en el interior, también es necesario contar con mobiliario y productos relacionados con el trabajo que estén diseñados ergonómicamente para resultar cómodos y seguros, y que puedan fomentar la productividad y la satisfacción.

¿Qué consejo daría a los jóvenes investigadores y diseñadores que buscan contribuir a este campo?

Mi consejo es sencillo: encuentre algo que le apasione, hágase preguntas, explore ideas, investigue para ponerlas a prueba, sea flexible y esté dispuesto a aceptar que sus ideas pueden ser erróneas y que quizá tenga que revisarlas, y manténgase siempre abierto y receptivo a las ideas de los demás.

— Basándose en su experiencia y conocimientos, ¿cuáles son sus predicciones para el futuro de la ergonomía y el diseño centrado en el humano en los lugares de trabajo? ¿Cómo cree que las tendencias tecnológicas y emergentes podrían afectar este campo en los próximos diez años?

Por desgracia, soy pesimista sobre el futuro de la ergonomía y el diseño centrado en el ser humano porque muchos de los programas académicos que existían en las universidades han ido cerrando y cada vez hay menos profesionales plenamente formados y comprometidos en este campo. No hemos hecho un buen trabajo a la hora de mostrar el valor real de un buen diseño ergonómico y, en consecuencia, nuestro enfoque en la sostenibilidad humana no ha estado a la vanguardia de gran parte del pensamiento de diseño actual. En EE.UU., la ergonomía se centra cada vez más en la mera reducción de las lesiones en el lugar de trabajo y, en consecuencia, otras profesiones de orientación médica también se han autoproclamado ergónomos, como los terapeutas ocupacionales, los fisioterapeutas, etc. Pero la verdadera ergonomía es mucho más que la mera prevención de lesiones.

Las tendencias tecnológicas que se han producido en la ergonomía se centran sobre todo en los métodos utilizados para analizar cómo trabajan las personas, pero no hay ningún lugar que muestre realmente cómo es un entorno diseñado de forma óptima. La mayoría de los programas de arquitectura y diseño no incluyen una formación completa en ergonomía. La mayoría de las empresas de arquitectura y diseño no emplean realmente a ergónomos ni los utilizan como consultores. En consecuencia, y lamentablemente, aunque el diseño ergonómico debería ser una consideración importante en la planificación de entornos, sólo hay unos pocos edificios que proporcionan lugares de trabajo ejemplares en términos de ergonomía.

artículos relacionados