BigMat presenta sus ideas y soluciones para elegir el termostato que más se adapte a cada necesidad. Se trata de una serie de consejos prácticos para disfrutar de la calefacción en invierno que proporciona confort y comodidad. Están incluidos en su folleto de calefacción.
Un termostato es un pequeño aparato que se utiliza para gestionar el sistema de calefacción o refrigeración, con el fin de mantenerlo encendido sólo cuando sea realmente necesario. Este útil y discreto dispositivo se ha mantenido durante décadas en nuestros hogares y oficinas, y es el responsable del confort y la comodidad de la temperatura de nuestros ambientes, tanto en verano como en invierno.
Tipos de termostatos
Hay tres tipos de termostatos: analógicos, digitales y programables. Hay variedad de modelos en el mercado y la elección dependerá de cada necesidad.
1. Termostato analógico: Los termostatos analógicos son los más tradicionales. Tienen una rueda manual que permite ajustar la temperatura. El sistema activa y desactiva la calefacción cuando la temperatura ambiente es inferior o superior a la temperatura ajustada.
2. Termostatos digitales: Los termostatos digitales son los más utilizados por su eficacia y fácil manejo. Se basan en sensores eléctricos capaces de controlar los cambios de temperatura. Tienen un bajo coste y son de fácil instalación. Señaliza la temperatura de la estancia a través de una pantalla digital donde vemos qué temperatura es la que realmente deseamos.
3. Termostatos programables: Es un termostato digital programable, también conocido como “crono termostato”. Permite controlar la temperatura y también regular el uso de la calefacción. Nos ayudan a controlar mejor la temperatura del espacio. Mediante este tipo de termostato digital, la calefacción es programable por horas e incluso días, con una temperatura exacta. Esto es especialmente interesante para programar el encendido y apagado de la caldera, evitando el derroche energético de dejar la calefacción siempre puesta y obteniendo el confort de llegar a casa y tenerla a una temperatura agradable.
Instalación del termostato
Los termostatos son muy sencillos de instalar; no hay necesidad de realizar grandes obras. Para poder hacerlo tan solo nos hará falta un taladro, destornillador y alguna herramienta más. Sin embargo, si hemos comprado un modelo muy complejo, o si bien no nos terminamos de aclarar con la instalación, siempre podemos solicitar los servicios de un instalador profesional y facilitarnos la vida.
El folleto BigMat contiene, en sus 16 páginas, un amplio abanico de estufas, chimeneas, radiadores y calefactores con los que hacer frente a la época invernal. Además, para facilitar al máximo el servicio, BigMat ofrece diversas prestaciones: llevar la compra a casa, preparar un proyecto de decoración, asesorar sobre la reforma, instalar los artículos y conseguir cualquier producto de construcción, reforma o bricolaje.