Onduline, empresa especializada en la construcción de materiales para la impermeabilización y aislamiento de cubiertas inclinadas, ha editado un completo ‘Manual de rehabilitación de cubiertas’, que puede descargarse de forma gratuita en www.onduline.es. El manual incluye información sobre la rehabilitación en el CTE, las patologías de la cubierta inclinada, los pasos a realizar en una rehabilitación y la idoneidad de los diferentes sistemas constructivos integrales, entre otros contenidos.
Como se explica en el nuevo manual de Onduline, en lo que se refiere a la rehabilitación de cubiertas inclinadas, el CTE presenta la obligación de impermeabilizar el soporte por debajo de unas pendientes mínimas, en función del tipo de teja utilizada. Cuando la pendiente sea superior al 15%, el impermeabilizante ha de ser fijado al soporte de forma mecánica. El CTE exige también que tenga una alta resistencia al punzonamiento estático, o que se instale una capa separadora entre ésta y el soporte. Además, la capa de aire debe ser ventilada y situarse por la cara exterior del aislante térmico.
Las soluciones integrales Onduline favorecen el cumplimiento de estas exigencias y de las inherentes a cualquier proceso de rehabilitación de cubiertas. En el manual se describen las ventajas y versatilidad del producto Onduline Bajo Teja y de las soluciones constructivas integrales que incluyen el panel sándwich Ondutherm.
A continuación se describe, paso a paso y con las especificaciones técnicas correspondientes, el proceso completo de rehabilitación, que difiere según las características previas de la cubierta. El manual se completa con la descripción técnica de los sistemas integrales constructivos de Onduline aplicados en la rehabilitación de cubiertas de hormigón/cerámica y teja mixta, y OSB/contrachapado y teja. Además, se incluye la ficha técnica de la gama de productos Onduline Bajo Teja (según tipo de teja, tornillería y soluciones accesorias) y Ondutherm (tipos de panel, acabados y accesorios).
El ‘Manual para rehabilitación de cubiertas’ de Onduline incluye otras informaciones de interés, como una guía de patologías de la cubierta inclinada y sus soluciones, o una referencia a las ayudas que el Estado ofrece para proyectos de rehabilitación.
Ventajas de Onduline Bajo Teja
Por sus características técnicas, las placas Onduline Bajo Teja aportan numerosas ventajas en rehabilitación de cubiertas inclinadas de teja. Su composición, a base de fibras minerales y vegetales y resinas termoestables saturadas en asfalto a alta temperatura, garantiza la impermeabilidad. Presenta, además, una gran flexibilidad, por lo que absorbe los movimientos estructurales sin fisurar. Es un producto de gran ligereza –pesa sólo 3 Kg/m2-, aspecto muy importante en proyectos de rehabilitación. Su formato ondulado crea un ‘tiro’ de ventilación que previene la condensación y por tanto las humedades, y su facilidad de manipulación permite que la placa se adapte a las irregularidades de la cubierta (encuentros, limas…)
Onduline Bajo Teja aporta soluciones a las patologías más habituales de las cubiertas inclinadas de teja. Las grietas que van produciéndose en la estructura no afectan a la placa por su flexibilidad, que además evita el paso del agua filtrada por la presencia de tejas desplazadas o rotas. Su forma ondulada favorece la ventilación frente a los problemas de condensación. Sirve de barrera ante los estancamientos de agua producidos por resoluciones incorrectas de instalaciones, y elimina la posibilidad de fisuras por deformación de la estructura u otros elementos de barrera.
Ventajas del sistema integral de cubierta
La solución constructiva integral que combina el panel sándwich Ondutherm y la placa Onduline Bajo Teja es una opción excelente para la rehabilitación de cubiertas en mal estado. Además de satisfacer los requerimientos exigibles a cualquier cubierta –impermeabilidad, ventilación y aislamiento-, ofrece ventajas añadidas en el caso de los proyectos de rehabilitación.
El panel sándwich Ondutherm destaca, como Onduline Bajo Teja, por su ligereza – entre 15 y 30 Kg/m2, según modelo-, y su versatilidad, cualidad fundamental ante los diferentes tipos de cubierta inclinada existentes. El bajo peso contribuye a aligerar la carga que soporta la estructura, contribuyendo a la seguridad estructural de la edificación, aspecto de vital importancia en edificios antiguos. A pesar de su reducido peso, el sistema ofrece una capacidad portante mínima de 300Kg/m2. Por otro lado, el empleo de materiales ligeros en cubierta redunda en una mayor seguridad para el instalador. Facilita el transporte, manejo en cubierta e instalación, lo que reduce el coste de la operación.
Este sistema constructivo requiere sólo tres intervenciones: la instalación del panel sándwich, que proporciona el acabado interior del espacio bajo cubierta y el aislamiento térmico necesario, trabajando además como forjado de la cubierta; la instalación de la placa Onduline Bajo Teja, que añade la impermeabilidad, y la instalación de la cobertura de teja como acabado final. De este modo, la cubierta queda cerrada desde la primera acción e impermeabilizada en la segunda, lo que previene de los daños y molestias que pueda ocasionar el clima. La rapidez del proceso supone un ahorro en mano de obra y materiales.
