En la industria AEC (Arquitectura, Ingeniería y Construcción), la Inteligencia Artificial (IA) tiene el potencial de aportar valor a lo largo de todo el ciclo de vida de los proyectos, desde la producción de materiales hasta el diseño, la planificación y la gestión.
Sin embargo, el de Construcción es uno de los sectores menos digitalizados. Muchos de sus procesos operativos siguen realizándose manualmente, utilizando hojas de cálculo tradicionales. Y la mayoría de los proyectos se ejecutan de forma reactiva porque no acceden a información en tiempo real.
“Los silos de información constituyen una de las grandes barreras para la digitalización de las empresas AEC”, destaca Diego Nieto, Director de Consultoría de Construcción para EMEA en SoftwareOne. “Cuando se usan herramientas dispares y no integradas, los datos se mantienen en sistemas y equipos distintos, perdiendo tiempo y efectividad en las operaciones manuales y en la toma de decisiones”.
Previsiones al alza
Mientras el volumen de negocio de Construcción alcanzó cerca de 9 billones de euros a escala global en 2022, y se espera que aumente hasta los 15,5 billones para 2030, la IA supone actualmente unos 100.000 millones de euros anuales, multiplicándose previsiblemente por 20 hasta cerca de los dos billones para 2030.
De hecho, la consultora IDC prevé que el crecimiento estará impulsado principalmente por el software centrado en la IA, con un incremento interanual superior al 30% hasta 2026.
La posibilidad de analizar datos y generar nueva información valiosa (lo que se denomina IA generativa) sobre edificios, puentes o carreteras ayudará a monitorizar los procesos, determinar cuándo se necesita mantenimiento preventivo e incluso guiar el comportamiento humano para mejorar su seguridad en la obra.
La nube, pilar del cambio
Pero esta evolución puede resultar compleja, sobre todo para las empresas del sector que aún no aprovechan otras tecnologías. “La clave está en repensar los sistemas y definir en qué parte de la cadena de valor la IA puede resolver o impulsar nuestro flujo de trabajo hacia la eficiencia”, continúa el responsable de SoftwareOne.
Además de eliminar silos de información, las plataformas integradoras en la nube mejoran la toma de decisiones en tiempo real al conectar todos los datos, personas y procesos, por lo que la tecnología cloud seguirá creciendo como pilar fundamental de la IA y otras tecnologías que requieren agilidad, escalabilidad y seguridad.
Y a medida que innovaciones complementarias como BIM, gemelos digitales o impresión 3D se adoptan en el sector AEC, crece la demanda de prácticas más ecológicas. “Tecnología y sostenibilidad van de la mano al fomentar una construcción más rápida y eficiente, lo que a su vez genera menos desperdicio y retrabajo”, concluye Nieto.
Con su capacidad para aprender, resolver problemas y reconocer patrones a escala, la Inteligencia Artificial seguirá ganando terreno para remodelar la forma en que se diseñan, construyen y gestionan las edificaciones.
