La filial española de L’Oréal inaugurará nueva sede en Madrid a finales de 2022. Se trata de un espacio de última generación firmado por Fenwick Iribarren Architects bajo estrictos criterios medioambientales y de sostenibilidad que contará con una superficie cercana a los 20.000 m² en la calle Alcalá 546, frente al parque Quinta de Torre Arias y junto a su estación de metro.
El nuevo edificio pretende conseguir una imagen simbólica y representativa en su visión desde la madrileña calle Alcalá. Para ello, se busca una volumetría potente y sencilla, generando una escala adecuada que permita identificar y entender el edificio desde su visión lejana.
La composición se genera a partir de unas costillas verticales que recorren las fachadas Norte y Sur, potenciando las fachadas acristaladas. En las fachadas Este y Oeste la composición de fachada es diferente marcando ventanales siguiendo los módulos estructurales del edificio.
Los accesos controlados a la parcela, tanto rodados como peatonales, se producen desde la Calle Alcalá y de la calle Dedalo. La entrada principal está localizada en la calle Alcalá donde se incluye la caseta del vigilante con servicio de 24 horas, mientras que la entrada desde la calle Dedalo es para personal autorizado principalmente donde se ubica otra caseta de control de accesos. Se generan zonas verdes en la parcela no ocupada por la edificación.
Todos los niveles por encima de la planta baja se dedican a servicio industrial o servicios empresariales. En la planta cuarta se generan dos terrazas que conectan con los espacios de trabajo generando zonas de esparcimiento. Adjacentes a estas terrazas se encuentran los espacios corporativos y presidenciales del edificio.
Asimismo, cabe destacar que se ha previsto la ejecución de un aparcamiento subterráneo de dos sótanos mas semisótano en planta inferior a la baja para cumplir con la dotación mínima exigida por el PGOUM y prever un número de plazas de aparcamiento adecuado a las necesidades del futuro edificio. Las plazas para vehículos de minusválidos, así como las previstas para coches eléctricos y eficientes, cumplen la dotación establecida en el CTE y las exigencias de certificación medioambiental LEED Platino V4. Además, se dispondrán estaciones de recarga para estos vehículos eficientes.
Se busca una volumetría potente y sencilla, generando una escala adecuada que permita identificar y entender el edificio desde su visión lejana
Los cuartos técnicos se sitúan en los sótanos y planta de cubiertas, de forma que se optimice el funcionamiento de las instalaciones. En planta sótano 1 se ubican cuartos técnicos eléctricos y el centros de transformación de abonado, garantizando el acceso desde el exterior y la correcta ventilación que requieren estas instalaciones.
La planta de cubiertas se tratará con especial interés. En los laterales al núcleo central de cubierta, se ha concentrado toda la maquinaria necesaria para el correcto funcionamiento del edificio. La zona orientada mas al sur se reserva íntegramente para ubicar paneles térmicos y fotovoltaicos, con el objetivo de mejorar los criterios de sostenibilidad implementados en el edificio.
En el edificio a cada lado del núcleo, se generan unos patios exteriores “espacio exterior contenido” en el que participan esencialmente muros transparentes, suelos y drenajes, mobiliario, vegetación, agua, etc. Estos patios están cerrados en su cara superior y se consigue la ventilación natural con exhutorios en los laterales superiores del mismo en la zona de cubierta.
El edificio Alcalá 546 forma parte de un nuevo desarrollo inmobiliario en torno al parque Quinta de Torre Arias, el nuevo distrito madrileño de la innovación MADBit. “Los equipos de desarrollo inmobiliario internacional de BNP Paribas Real Estate, al que se ha sumado la promotora local Therus Invest, están muy orgullosos de haber trabajado muy de cerca con el Grupo L’Oréal para ofrecer a su filial española un edificio de esta calidad, con certificación Leed Platino. Y en pleno distrito MadBit, una de las zonas madrileñas de mayor crecimiento empresarial, un entorno muy atractivo para todo tipo de compañías”, recalca Antoine Mabilon, director de International Property Development de BNP Paribas Real Estate.
