Texto: Fernando de la Rubia Jiménez, técnico de CITAV – Centro Información Técnica de Aplicaciones del Vidrio de Saint – Gobain BUILDING GLASS.
Hoy se celebra el Día Mundial de la Construcción Sostenible, que coincide además con la Cumbre sobre la Acción Climática, y sirve como llamada de atención para recordar que la sostenibilidad es transversal y tiene que estar entendida en todos los proyectos de arquitectura, desde su concepción hasta el último material empleado en su construcción.
Las personas estamos el 90 % de nuestro tiempo en espacios cerrados, por lo que podemos afirmar que los edificios en los que vivimos, trabajamos o pasamos nuestras horas libres, generan un impacto en nuestra salud y bienestar.
Del mismo modo, la conceptualización, construcción y uso de dichos edificios generan un fuerte impacto en el medioambiente. A pesar de que España no se caracterice por ser un país pionero en lo que a materia de sostenibilidad se refiere, es importante señalar que el sector de la edificación no deja de mostrar avances debido a la repercusión que tiene tanto en la salud de las personas como en la protección del medioambiente.
Fomentar la construcción de edificios sostenibles es prioritario para preservar el futuro de nuestros países. La reducción del impacto sobre el entorno y la mejora de los procesos de fabricación son el modo de contribuir a la conservación del planeta, ya que el compromiso medioambiental está estrechamente ligado a la innovación, al desarrollo y a la calidad de los productos que se fabrican.
Las dos fechas de referencia están bastante claras en el calendario: Año 2030, con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU y año 2050, fecha en la que Europa sea climáticamente neutra, reduciendo al máximo la huella de carbono.
La figura de la Declaración Medioambiental de Producto (EPD) juega un rol importante, no tanto como documento que certifica, sino como el resultado de un análisis profundo del ciclo de vida del producto, como es el vidrio, en nuestro caso.
A través de una metodología multidisciplinar, mide la huella de carbono, desde la extracción de materias primas, la fabricación, el transporte, la instalación, la vida útil hasta su fin y la gestión de reciclaje.
Esta declaración es útil para conocer en profundidad los valores de cada producto y poderlos comparar entre sí, buscando siempre la mayor sostenibilidad en cada proyecto.
En el caso de Saint – Gobain BUILDING GLASS, todos sus vidrios poseen una EPD de máximo nivel, que cuenta con su propia declaración interna, ratificada y validada por una auditora externa, siendo además el líder mundial en número de EPDs.
Estos documentos, además, se convierten en necesarios para la obtención de los certificados de edificios como el LEED, BREAM o Verde. En el caso del LEED, el más implantado en España, el uso de vidrios de alta eficiencia puede llegar a conseguir 44 puntos en la valoración de la certificación. Esto se debe a distintos procesos: reducción de consumo energético, la facilidad de reciclaje al fin de su vida útil, su capacidad integradora, etc. Actualmente, existen alrededor de 260 edificios en España que cuentan con certificado LEED y que ven cómo sólo por el hecho de poseerlo, se incrementa su valor en el mercado entre un 10% y un 20%, lo cual despierta también el interés de las grandes promotoras.
Estos inmuebles, que cuentan con el aval de LEED, BREAM o Verde como garantía de sostenibilidad, aunque en la actualidad sean excepciones más enfocadas al mercado de oficinas, cumplen una función ejemplarizante y sirven de faro y espejo para los que vendrán y los que se transformarán.