El estudio de decoración y estilismo Jaione Elizalde fue contratado por un cliente para realizar una intervención completa de amueblamiento en una vivienda.
La vivienda, que había sido anteriormente reformada por RIA Construcción, carecía de mobiliario y almacenaje, a excepción de la cocina y el baño. El cliente deseaba una intervención que diera carácter y cierto diseño a la vivienda, trabajando con elementos nobles que aportaran calidez a los tonos grises y blancos de la reforma.
El equipo de diseño creó mobiliario a medida en madera de roble natural, comenzando por un mueble de entrada minimalista con algo de almacenaje que incluía un espejo, palillería y espacio para una obra de arte del cliente.
En la zona de recepción, que inicialmente estaba abierta al espacio de salón cocina, se colocó una celosía en lamas de madera de roble con forma de remo, que permitía la apertura tanto horizontal como vertical con una sujeción únicamente en el techo, para dar intimidad cuando fuera necesario.
El mueble de entrada destaca por la curvatura en su extremo y el cuidado de las terminaciones.
En la zona de estar principal se colocaron piezas de la firma Ligne Roset y se realizó una librería con espacios irregulares en forma y disposición, con iluminación led interior y algunas puertas en laca de la referencia del color de los textiles. Se dispuso un mueble de televisión con una bandeja en cristal tintado y un módulo para albergar y extraer un proyector, con el foseado que albergaba la pantalla para visualizar las imágenes.
La zona de noche contaba con una segunda zona de estar más privada, que hacía de nexo de unión entre la zona de día y de noche, con un espacio de trabajo oculto con puertas escamoteables, estantes y mesa de trabajo.
En el dormitorio principal se realizó un armario a medida con puertas lacadas en blanco y un módulo de la misma línea de Roche Bobois como zona de relax, así como un panel de madera para la zona trasera del cabecero con iluminación ambiental integrada.
