Casa Roig cuenta con 140 m2 de superficie, los cuales están distribuidos con el objetivo de ganar espacio y amplitud en cada una de sus estancias.
En la entrada se encuentra un amplio recibidor que da la bienvenida al salón/comedor de la vivienda. Por uno de sus lados dicho acceso está revestido con un panelado de madera que continua y viste el comedor de la casa. En otro de sus lados el recibidor está revestido con microcemento, el cual se prolonga hacia la zona de estar.
Este juego visual entre madera y microcemento aporta sensación de continuidad y armonía a gran parte de la zona principal de la vivienda. Dotando de personalidad y carácter a todo el espacio.
Siguiendo con el planteamiento de diseño elegante y sobrio, el pavimento escogido para vestir el suelo de Casa Roig ha sido la madera natural. Este elemento está muy presente a la hora de dar vida a este proyecto, pensado como el ingrediente principal e hilo conductor del diseño interior de este hogar.
La cocina la encontramos en la zona de entrada de la vivienda. Integrada en el espacio, pero diferenciada del resto de estancias mediante una puerta corredera de cristal y madera. De este modo permitimos que la luz se abra paso y a la vez generamos esa sensación de independencia de espacios.
La habitación principal cuanto con un baño en suite y una amplia armariada diseñada a modo de vestidor. Tanto el baño secundario como el principal están diseñados con acabados de alta gama de la firma Porcelanosa, revestidos con porcelánico de gran formato y diseñados con el cuidado del más mínimo detalle.
En definitiva, los materiales empleados en este proyecto son de origen natural y puro, siendo la madera el eje vertebrador sobre el que se configura todo. Los tonos neutros, como el blanco y el microcemento gris claro, junto con el marrón predominan en las estancias, pasando por toda la paleta de tonos cálidos.
Casa Roig ve la luz como un proyecto de reforma integral moderno y reforzado en la idea visual de la armonía de los espacios.