La esencia de una casa de pueblo con espacios abiertos al exterior, en una búsqueda constante de la luz, al abrigo de miradas indiscretas. Así describe ra[ ]el arquitectura esta vivienda unifamiliar de tres plantas ubicada dentro del tejido urbano consolidado de Rafelbunyol, en Valencia.
© Joan Roig
Este hogar se ha proyectado bajo los parámetros de alta eficiencia energética y sostenibilidad característicos del estudio, incorporando una envolvente de gran inercia y aislamiento térmico, fachadas y cubiertas ventiladas, ventanas de altas prestaciones, así como un sistema de climatización por aerotermia y gestión integral del agua (griferías de alta eficiencia, sistema de recirculación de ACS, potabilizadora de agua de red). Además, cuenta con un sistema de generación fotovoltaica en cubierta que cubre en gran parte el consumo total de la vivienda.
Este es uno de los rasgos que definen la edificación, además de la economía de materiales y la sencillez formal, sin dejar de lado la comodidad de los propietarios, que demandaron una vivienda totalmente accesible con ciertas pinceladas de la antigua casa a la que estaban arraigados.
Formalmente, se mantuvo la situación de la parte edificada dentro del solar, aunque liberando la planta mediante espacios abiertos exteriores, transversales y longitudinales para permitir una mayor entrada de luz y para generar circulaciones de aire que mejoran la eficiencia energética de la vivienda.
La vivienda se configura con una superposición de volúmenes y materiales que define diferentes niveles de relación con el entorno. Así, se dispone un primer volumen de hormigón austero y opaco que deja el interior al abrigo de las miradas indiscretas, quedando patente el carácter introvertido e intimista de la vivienda. Solo cuando se alcanza cierta altura aparecen perforaciones en el hormigón que filtran la entrada de luz.
La vivienda se configura con una superposición de volúmenes y materiales que define diferentes niveles de relación con el entorno
Los volúmenes superiores tratados de forma neutra, dejan un gran patio que articula la vivienda, y actúan como lienzo del cuerpo principal del edificio, una caja de madera que ocupa la esquina del solar y que se apoya en el basamento de hormigón. La distribución de la vivienda gira en torno al patio que permite la entrada del sol en todo su recorrido a lo largo del día, y a él se vinculan la mayor parte de las estancias de la casa.
El acceso a la vivienda se realiza a través de un gran hueco en el paño de hormigón a un patio semidescubierto, que supone la transición entre lo público y lo privado, y destaca la presencia de un naranjo que reivindica la función de este espacio, en el que se ha pretendido recuperar la costumbre de reunión vecinal al final de las tardes estivales, tan propio de la vida en los pueblos.
En el patio principal se ha remarcado el carácter mediterráneo de la casa situando un olivo y una pequeña fuente de los que disfrutar todo el año, debido a su orientación y a la climatología de la zona. Este espacio al aire libre, protegido de las miradas exteriores, atrae la atención desde todos los puntos de la vivienda.
La zona de día se sitúa en planta baja. Intercalados por los patios se relacionan visualmente la cocina, el estar comedor, la zona de trabajo, y a su vez, la planta está vinculada con las otras dos a través de un hueco central en el salón que inunda toda la vivienda de luz natural.
La planta primera se dedica a la zona de noche, de nuevo articulada alrededor del patio principal y conectada visualmente con el resto de las plantas gracias también a la colocación de barandillas de vidrio sin perfilería, tanto en la doble altura que vuelca al salón como en los balcones exteriores. En la última planta se ubica la biblioteca y otra zona de trabajo, en la que los grandes huecos de la carpintería permiten disfrutar dentro de este espacio de reflexión, de las privilegiadas vistas sobre las cubiertas de la edificación del entorno.
El interiorismo de la casa reivindica la coexistencia y armonía de un mobiliario funcional y contemporáneo con piezas antiguas recuperadas de gran valor sentimental para los propietarios. La escalera que recorre escultóricamente todas las plantas se ha revestido de madera de roble, dejando visto el hormigón en la parte inferior. El cerramiento junto a la escalera es de vidrio y vuelca al patio de entrada dotando de iluminación natural todo el espacio.
La escalera que recorre escultóricamente todas las plantas se ha revestido de madera de roble, dejando visto el hormigón en la parte inferior
