En la cadena de restaurantes Five Guys siguen apostando por los valores que les vieron nacer hace ya 35 años. Su esencia es el producto y su trabajo genuino, por eso todas sus cocinas son abiertas a la vista del público, lo que les gusta llamar el stage, ¡pasen y vean! Los restaurantes son sencillos, sin comunicación promocional y siempre con un toque de Rock and Roll.
Tal y como asegura Daniel Agromayor, director general de la compañía en España y Portugal, «la simplicidad y la transparencia son dos factores fundamentales para que los fans de las burgers puedan disfrutar de una comida tranquila en nuestros restaurantes». Crear un ambiente agradable para los clientes pasa por construir lo mismo para su equipo humano. «La disposición del espacio tiene que facilitar sus tareas para que preparar las más de 250.000 combinaciones posibles de Five Guys sea pan comido» sentencia.
En lo que se refiere a los materiales empleados, y teniendo en cuenta su compromiso con la higiene, la marca se decanta por superficies como el acero inoxidable y el cuarzo en las encimeras, permitiendo así una limpieza y desinfección eficaz en poco tiempo.
Para crear distintos ambientes y usos tanto individuales como grupales, la firma intercala mobiliario alto y bajo que permita la agrupación de personas y la elección del lugar perfecto según los gustos de cada cliente. En los salones de los restaurantes se apilan y almacenan los ingredientes que luego se utilizarán en cocina: los sacos de patatas frescas de 20 kg listas para ser lavadas y cortadas a mano, el aceite de cacahuete que usan para el cocinado de sus patatas o las cajas de cacahuetes tostados a libre servicio.
«Nada más llegar a los restaurantes el material que más llama la atención es la madera de nuestras mesas y asientos. A esto se suma el increíble efecto óptico del alicatado de las paredes hasta media altura en blanco y con el checker de Five Guys haciendo las veces de cenefa por todo el local» apuntan desde Five Guys. Los tres materiales base de todos sus restaurantes son: madera de roble maciza, alicatados depurados y acero inoxidable.
«Nuestro conocido checker, la línea de cuadrados blanca y roja que tanto nos caracteriza, envuelve las paredes y acoge a nuestros fans en un entorno que invita a la comodidad y disfrutar de una deliciosa comida» apunta el director general de la compañía en España y Portugal. Las sencillas lámparas que cuelgan de los altos techos dan el toque final a la combinación de colores corporativos alternando el rojo y blanco para dar una iluminación cálida a las comidas y cenas de cada cliente.
El suelo y techo están bañados por un tono oscuro, mientras que la climatización se realiza a través de “red dragons”, unos amplios tubos en el rojo corporativo que cuelgan del techo para distribución de climatización. Además, el imponente sistema de extracción permite situar las cocinas en el centro del restaurante sin trasmitir olores o humos al salón de comensales.
En los salones de los restaurantes se apilan y almacenan los ingredientes que luego se utilizarán en cocina
En palabras de Agromayor, el rojo y el blanco son sus colores y lo llevan por todo el restaurante para sentirse como en casa. «Queremos que cualquier persona que pase por delante de nuestros restaurantes pueda reconocernos de un solo vistazo, y para ello una identidad visual llamativa y basada en los colores corporativos es fundamental». En este sentido, el alicatado de la pared con sus cinco elementos rojos sobre fondo blanco es lo que más resalta al entrar en los restaurantes. También las amplias encimeras de cuarzo, así como la transparencia y permeabilidad de todo lo que ocurre dentro de las cocinas.
El alicatado de la pared con sus cinco elementos rojos sobre fondo blanco es lo que más resalta al entrar en los restaurantes
¡Que comience el festín!
