El barrio barcelonés de Torre Baró se caracteriza por su valioso paisaje urbano, producido por su atmósfera doméstica y tranquila, la fuerte presencia de la vegetación y la topografía acusada que ofrece vistas sobre la montaña de Collserola y la vega de Besós.
El proyecto desarrollado —firmado por Burgos & Garrido Arquitectos y Alday & Jover— trata de sacar el máximo partido de estas condiciones y, por ello, se aleja de los linderos laterales arbolados y permite que la luz y las brisas crucen libremente el edificio de lado a lado.
Se busca modificar mínimamente la fuerte topografía existente para hacerla parte sustancial del proyecto. Una secuencia de espacios distintos y bien cualificados establece el vínculo espacial y lumínico entre las dos calles que bordean la parcela. El acceso al conjunto se produce a través de un porche que abre a la calle Escolapi Cáncer y que recoge suavemente su pendiente. Desde aquí, se pasa al patio y, continuando gradualmente por el paisaje interior aterrazado, se llega al remanso horizontal que mira al sur y a la calle Castelldefels.
El exterior del edificio es fruto del carácter colectivo de la ciudad. Es sobrio y firme, los huecos bien diseñados —formados por un pequeño balcón y persianas mallorquinas—, articulan las fachadas, y su repetición, adición y diferente posición establecen el orden general y cierta vibración. El interior construye un escenario de atmósfera doméstica para los habitantes.
El volumen edificado es un prisma compacto que se envuelve sobre sí mismo
El volumen edificado es un prisma compacto que se envuelve sobre sí mismo alojando en su interior un patio abierto al sur, luminoso y aireado, que es el verdadero corazón del proyecto y da acceso a todas las viviendas. Sus plantas se adaptan a la topografía sobre la ladera y flota sobre el terreno, dejando pasar el aire y las vistas entre el norte y el sur. Pequeños ensanchamientos en las pasarelas de acceso y en las zonas horizontales ganadas a la pendiente generan lugares colectivos donde conversar o tomar el sol, incorporando el encargo recursos de la mejor arquitectura mediterránea con un volumen cerrado y abierto, nítido y complejo, que genera un espacio rico.
